martes, 8 de mayo de 2012

El Carmelo es todo de María

 
 
El que esto escribe se siente Carmelita de corazón. No vive en un monasterio, pero vive en la Iglesia su vocación contemplativa en medio de una gran ciudad. Ahí en medio del ruído, de la soledad y del anonimato vive una vocación de servicio que es la vocación orante.

El primer post, como buen carmelita no puede estar dedicado a nadie más que a María. La "Señora del lugar", que desde los inicios del carisma carmelitano en el monte Carmelo ha estado siempre ahí, de la misma manera que ella acogió y dió comienzo en su seno a la historia de Jesús.

Como dice Isabel de la Trinidad"María guardaba todas estas cosas en su corazón. Toda su historia puede resumirse en estas breves palabras. Porque efectivamente ella vivió recogida siempre en su corazón y en una profundidad tan íntima que nuestra mirada es incapaz de penetrar".

La Virgen del Carmelo es la Virgen de la contemplación. La actitud de María que ora y medita y que se pone en camino para servir a Isabel provocando una efusión de gozo en el Espíritu Santo, ha sido desde los primeros tiempos del Carmelo la norma de vida de los carmelitas. Vida Marieforme porque era imitación de la Virgen y llegaba a crear una hermandad con ella que era vínculo de estrecha comunión y de servicio. Desde entonces el hilo de oro que enebra toda la historias del Carmelo hasta nuestros días es esa devoción mariana, no hecha de "devociones bobas" en palabras teresianas, sino hecha de imitación de la Virgen contemplativa y pregonera de las maravillas de Dios.

Por eso, a imitación de María, así quiere ser la vida de este Carmelita laico en la ciudad: meditación amorosa de la Palabra, de comunión inefable con el Dios presente, de manifestación de la experiencia espiritual, de canto y poesía -como el Magníficat- que el amor de Dios hace en las personas y en la historia entera. Como Carmelita quiero vivir la vida de la Virgen: sensibilidad para escuchar, acoger y vivir cada una de las palabras del Evangelio, atención exquisita a las necesidades de los hermanos que se traduce en un amor intenso y eficaz, capacidad para saber perder todo lo que no es Dios y su voluntad en una actitud que purifica y ensancha el corazón.

5 comentarios:

  1. Enhorabuena por esta iniciativa y larga vida a tu blog.
    Un fuerte abrazo,
    Víctor

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  2. Hola Gonzalo. Me alegro de tu blog. Y me alegro de los Carmelitas. El Carmelo de Missão de Sahy a dos horas de donde nosotros vivimos es una segunda casa y las monjas son madres y amigas. Un abrazo y sigue compartiendo tu experiencia y tu espiritualidad para que nos alcance a todos. Un abrazo. Miguel.

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  3. Un saludo. Quisiera pedirte que me indicaras la referencia bibliográfica (completa, por favor) de las palabras de Santa Isabel que citas: "María guardaba todas estas cosas en su corazón. Toda su historia puede resumirse en estas breves palabras", etc.

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  4. Perdón. Publico esto solo para marcar el "avisarme", porque lo he olvidado antes.

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  5. Feliz día de de Nuestra Madre María Santísima del Monte Carmelo.

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